Pedro I el Cruel

Resumen del libro

En 1369 el rey don Pedro I de Castilla moría asesinado por su hermano bastardo, Enrique de Trastámara, que lograba así usurparle el trono. Era el final de una cruenta lucha fratricida que había teñido de sangre, intrigas y traiciones todo el reinado de aquel desdichado monarca cuya memoria, a raíz de su muerte, quedaría cubierta bajo un velo de infamias.


Un acercamiento objetivo a la figura del Rey Cruel nos desvela, sin embargo, a un personaje fascinante, amigo por igual de árabes, judíos y cristianos, aficionado a la magia y capaz de entregarse a intensas y generosas pasiones, como la que vivió junto a la dulce María de Padilla.


Manuel Barrios reconstruye de forma magistral la dramática vida del rey castellano, al tiempo que reivindica la figura de un personaje que supo seducir por igual a la historia y a la leyenda.

Biografía del autor

(San Fernando, Cádiz, 1924 x{0026} x02013; Sevilla, 2012) novelista, ensayista, flamencólogo, autor teatral, hombre de radio y periodista español, considerado entre los más sólidos valores de la llamada Nueva narrativa andaluza . Su trayectoria se concreta en más de setenta libros publicados y cuarenta y cuatro premios x{0026} x02014;varias veces finalista del Nadal, publicó excelente novelas como El crimen, La espuela o Epitafio para un señoritox{0026} x02014;, miles de artículos en prensa y programas radiofónicos. Tocó muchos temas en sus investigaciones más profundas y está considerado pionero por su biografía en torno a la figura de Queipo de Llano, titulada El último virrey, de la que el propio autor dijo en 1990: No sé si este es mi mejor libro x{0026} x02014;ni siquiera si tengo un libro mejorx{0026} x02014;, pero sí que es el más pacientemente trabajado . Hoy rescatamos este libro con un valioso prólogo de Francisco Espinosa Maestre y un epílogo de su hijo, Manuel Barrios Casares. La memoria histórica española no sólo debe jugar un papel con aquellos que la protagonizaron, también con aquellos que, como es el caso, la supieron contar con un notable grado de acierto.