Editorial Penguin Clásicos
Colección Clásicos españoles, Número 0
Fecha de edición junio 2015 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788491050124
304 páginas
Libro
encuadernado en tapa blanda
Dimensiones 125 mm x 190 mm
x{0026}lt;p x{0026}lt;B Los mejores libros jamás escritosx{0026}lt;/B x{0026}lt;/P x{0026}lt;p x{0026}lt;B Edición de Enrique Rubio Cremades, catedrático de literatura española en la Universidad de Alicantex{0026}lt;/B x{0026}lt;/P x{0026}lt;P Juan Valera defendía que el arte es desinteresado. Empeñado en atacar tanto a los románticos como a los naturalistas, nunca se adscribió a ningún movimiento esteticista, como el simbolismo, que bajo la insignia de x{0026}lt;I l'art pour l'artx{0026}lt;/I , intentaba renovar las tendencias artísticas en el cambio de siglo. Su escritura sencilla, llena de pinceladas detallistas y apuntes objetivos -que le alejan de los románticos-, y su meticuloso análisis de los personajes -que le acerca a Stendhal y Flaubert-, encuentran su máxima expresión en x{0026}lt;I Pepita Jiménezx{0026}lt;/I (1873), obra maestra de la novela española del XIX, al servicio de un joven seminarista que cuelga los hábitos por una joven viuda a la que corteja su padre.x{0026}lt;/P x{0026}lt;P Esta edición incluye una introducción que contextualiza la obra, un aparato de notas, una cronología y una bibliografía esencial, así como también varias propuestas de discusión y debate en torno a la lectura. Está al cuidado de Enrique Rubio Cremades, catedrático de literatura española de la Universidad de Alicante.x{0026}lt;/P x{0026}lt;p x{0026}lt;B Los ángeles y los demonios deben reírse igualmente de mí y no tomarme por lo serio. x{0026}lt;/B x{0026}lt;/P
Juan Valera (1824-1905). Natural de Cabra (Córdoba), hijo de una familia en la que conjugaba la herencia aristocrática con el liberalismo moderado. Cursó sus primeros estudios en el Seminario de Málaga (1837-43), continuándolos en Madrid, donde obtiene en 1846 la licenciatura en Derecho. Sus aprendizajes literarios supieron combinar las modas románticas con las invariantes clásicas y el pensamiento ilustrado. En 1847 inicia en Nápoles su carrera diplomática, que será la constante de su vida. Entre 1860 y 1880 Valera ejerce de ensayista histórico y religioso, de crítico literario y empieza a tantear la novela: Pepita Jiménez (1874), obra maestra de madurez, abre su primer ciclo de novelista, que culmina Doña Luz (1879). El segundo ciclo de creación novelesca se abre con Juanita la Larga (1895) y se cierra con Morsamor (1899). En los quince años que median entre estas etapas creadoras Valera escribe un ensayo fundamental, Apuntes sobre el nuevo arte de escribir novelas (1887), para la historia de la novela española del Realismo y del Naturalismo, poéticas que siempre interpretó de modo severamente crítico, haciendo buena su auto calificación de hombre de los peros y de los aunques .
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