Editorial Le Livre de Poche
Lugar de edición
Paris, Francia
Fecha de edición mayo 1998 · Edición nº 1
Idioma francés
EAN 9782253046394
189 páginas
Libro
Colette, dans sa jeunesse, a fréquenté ces fumeries d'opium dont l'adresse se transmet de bouche à oreille entre initiés, mais en gardant ses distances vis-à-vis de la drogue donneuse d'oublie ; ce sont surtout les personnages qu'elle y a rencontrés qui l'ont captivée. Que cache cette énigmatique Charlotte ? Quel sentiment réel anime ce don juan haïsseur de ses conquêtes ? quelle vérité se cache dans le mensonge des travestis qu'arborent l'un et l'autre sexe ?... Ces chercheurs de plaisirs interdits, de ceux que l'on dit impurs : plaisir factice de l'opium et de l'alcool, plaisir clandestin des amours admises ou défendues... Colette nous les évoque magistralement dans Le Pur et l'Impur dont elle a dit : " On s'apercevra peut-être un jour que c'est là mon meilleur livre. "
Colette, cuyo nombre completo era Sidonie-Gabrielle Colette, nació en 1873 en una pequeña localidad de Borgoña. Educada sobre todo por su madre, mujer moderna e inconformista, que había causado escándalo al acoger a su servicio a jóvenes madres solteras, y en la que la autora se inspiró para escribir la novela Sido (1930), Colette pasó la infancia en estrecho contacto con la naturaleza, algo muy presente en su obra literaria. A los veinte años se casó con Henry Gauthier-Villars, personaje muy destacado de la Belle Époque parisina, conocido con el seudónimo de Willy, y se trasladó a la capital. Bajo la influencia de su marido, comenzó a escribir y publicó las novelas de la serie Claudine , que, inicialmente atribuidas a Willy, tuvieron un gran éxito. Tras un tumultuoso divorcio, buscó la emancipación y el reconocimiento personal trabajando como actriz de teatro y de music-hall, experiencias descritas en La vagabunda (1910), y escandalizando a la sociedad parisina con sus actuaciones provocadoras y su vida amorosa poco convencional. Escribió más de setenta obras, entre las cuales destacan Chéri (1920) y Gigi (1944), adaptada luego al cine por Vincente Minnelli. En 1945 fue admitida en la Academia Goncourt y fue la primera mujer en presidirla, hasta su muerte, en 1954.
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