Editorial Editions Du Masque
Fecha de edición noviembre 2014 · Edición nº 1
Idioma francés
EAN 9782702441534
Libro
encuadernado en tapa blanda
Parvenus à l'âge de la retraite, Tommy et Tuppence Beresford ont acheté une nouvelle maison où ils espèrent couler des jours heureux. Mme Beresford entreprend de ranger les livres d'enfants laissés dans le grenier depuis plusieurs générations de propriétaires. Très enthousiaste à la découverte de ces trésors littéraires qui ont bercé sa jeunesse, elle tombe sur une édition bien particulière de La Flèche noire de Stevenson.
En effet, des lettres du texte ont été entourées pour former une phrase des plus intrigantes : "Mary Jordan n'est pas morte de mort naturelle, c'est l'un de nous qui l'a tuée". Il n'en faut pas plus pour pousser les Beresford à mener l'enquête !
Agatha Christie es conocida en todo el mundo como la Dama del Crimen. Es la autora más publicada de todos los tiempos, tan solo superada por la Biblia y Shakespeare. Sus libros han vendido más de dos mil millones de ejemplares en todo el mundo. Escribió un total de ochenta novelas de misterio y colecciones de relatos breves, más de veinticinco obras de teatro y seis novelas escritas con el pseudónimo de Mary Westmacott. Probó suerte con la pluma mientras trabajaba en un hospital durante la Primera Guerra Mundial, y debutó en 1920 con El misterioso caso de Styles, cuyo protagonista es el legendario detective Hércules Poirot, que luego aparecería en treinta y tres libros más. Alcanzó la fama con El asesinato de Roger Ackroyd en 1926, y creó a la ingeniosa Miss Marple en Muerte en la vicaría, publicado por primera vez en 1930. Se casó dos veces, una con Archibald Christie, de quien adoptó el apellido con el que es conocida mundialmente como la genial escritora de novelas y cuentos policiales y detectivescos, y luego con el arqueólogo Max Mallowan, al que acompañó en varias expediciones a lugares exóticos del mundo que después usó como escenarios en sus novelas. En 1961 fue nombrada miembro de la Real Sociedad de Literatura y en 1971 recibió el título de Dama de la Orden del Imperio Británico, un título nobiliario que en aquellos días se concedía con poca frecuencia. Murió en 1976 a la edad de ochenta y cinco años. Sus misterios encantan a lectores de todas las edades, pues son lo suficientemente simples como para que los más jóvenes los entiendan y disfruten, pero a la vez muestran una complejidad que las mentes adultas no consiguen descifrar hasta el final.
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