La Tierra siempre ha tenido más o menos el mismo volumen, pero los medios de transporte, cada vez más rápidos y seguros, consiguen que parezca más pequeña y fácil de recorrer. Hace 136 años, dar la vuelta al mundo en 80 días parecía imposible. Pero siempre hay gente intrépida con ganas de superar retos, como Phileas Fogg, el protagonista de esta cronometrada obra de Jules Verne. Fogg, acompañado de su fiel mayordomo, Jean Passepartout, nos demuestra que si tenemos confianza en nosotros mismos siempre encontraremos el camino. Y también que, incluso si fracasamos, siempre podemos aprender una lección positiva. Un texto de ritmo ágil, casi frenético, y cargado de matices y de giros argumentales que ofrecemos sintetizado por Lewis York sobre un soporte de lujo: las magníficas ilustraciones creadas para la ocasión por Ian Casalucci. Un clásico que apetece más que nunca revisitar, porque siempre permite nuevas lecturas y nuevas imágenes como estas doce maravillosas ilustraciones a doble página de técnica mixta: tinta china y acuarela.
Jules Verne (1828-1905) es uno de los grandes nombres de la literatura universal y una figura clave en el nacimiento de la ciencia ficción. Escribió más de sesenta novelas que combinan aventura, precisión científica y un inconfundible espíritu explorador. Obras como Veinte mil leguas de viaje submarino , Viaje al centro de la Tierra o La vuelta al mundo en ochenta días han inspirado a generaciones de lectores y creadores, y siguen siendo puerta de entrada al asombro y la imaginación. Su legado permanece vivo en cada historia que se atreve a pensar más allá de lo posible.
|