Editorial Verbum
Colección Narrativa, Número 0
Fecha de edición mayo 2017 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788490745243
226 páginas
Libro
encuadernado en tapa blanda
Dimensiones 140 mm x 195 mm
En este volumen recopilatorio pueden encontrarse algunos de los escritos más divertidos de Jardiel Poncela, cuidadosamente elegidos entre la ingente cantidad de las colaboraciones en revistas de humor que realizó a lo largo de su vida. A este gran humorista se le conoce más por su dramaturgia y su novelística, pero también se dedicó a las narraciones, a los artículos satíricos y a otras formas narrativas igualmente interesantes. La caza del marido y otros escritos de humor ofrece al lector más de sesenta trabajos breves de variado género: cuentos, artículos, poesías, teatro, aforismos, etc. Todos tienen el sello jardielesco característico: originalidad, ingenio, elementos absurdos, cosmopolitismo y una sana comicidad, que hará las delicias de todo tipo de lectores.
Enrique Jardiel Poncela (Madrid, 1901-1952) es uno de los grandes renovadores de la novela y el teatro de humor. Tras publicar 'Amor se escribe sin hache' (1929), viajó a Hollywood como guionista de la Fox. Miembro del grupo literario bautizado por José López Rubio como La otra generación del 27 , del que también forman parte Edgar Neville y Miguel Mihura, es autor de obras de narrativa como 'Novísimas aventuras de Sherlock Holmes' (1928), '¡Espérame en Siberia, vida mía!' (1930), 'Pero ¿hubo alguna vez once mil vírgenes?' (1931), 'La tournée de Dios' (1932) y 'Los 38 asesinatos y medio del Castillo de Hull' (1936), aunque su mayor popularidad la obtuvo en el teatro con comedias que suscitaron fuertes polémicas en el momento de su estreno y cosecharon enorme éxito: 'Usted tiene ojos de mujer fatal' (1933), 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás' (1936), 'Eloísa está debajo de un almendro' (1940),'Los ladrones somos gente honrada' (1941) Hoy es considerado un maestro de la literatura de humor. Complejo, pesimista y desigual, en su nicho mandó grabar el epitafio: Si queréis los mayores elogios, moríos .
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