Flaubert murió en 1880 y desde entonces sus libros no dejan de constituir una referencia para autores o incluso para escuelas literarias antitéticas, ya sea en Francia como fuera de ella. El legado es vasto.
Se dice de Flaubert que fue el primer novelista moderno; el padre del realismo; el verdugo del romanticismo; el puente que une a Balzac con Joyce; el precursor de Proust. Podría añadirse, apelando a Henry James, que Flaubert fue el novelista de los novelistas . O que a partir de su obra nada fue igual: los narradores juzgaron menos y observaron más.
Esta antología ambiciona plasmar una galaxia contemporánea a la figura central de Flaubert: desde la sombra de su ídolo Victor Hugo hasta las páginas de algunos de sus hijos espirituales como Maupassant o Zola (desde el romanticismo hasta el naturalismo), pasando por sus amigos o más cercanos interlocutores. Para ello, se ha recurrido a varios textos inéditos o muy poco difundidos en lengua española. El resultado excede el primer objetivo: las obras seleccionadas pueden leerse como el retrato de una época, corazón del siglo XIX, en la que Francia se ubicó al frente de la producción y el debate literarios, o también pueden recorrerse las semblanzas de los catorce autores aquí reunidos como una impensada comedia humana .
Nacido en Buenos Aires en 1964, Eduardo Berti vive en Burdeos. "Una presencia ideal" es el fruto de una residencia literaria en el seno de una unidad de cuidados paliativos de un hospital de Rouen.
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