Editorial Biblioteca Nueva
Colección Literatura de humor, Número 0
Lugar de edición
Madrid
Fecha de edición abril 2017 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788416938339
160 páginas
Libro
Dimensiones 140 mm x 210 mm
Cuando Jardiel entregó a la imprenta sus tomos recopilatorios de piezas cortas El libro del convaleciente y Exceso de equipaje eligió escritos que había publicado en diversas revistas durante los años veinte y treinta, desechando el resto. Resultaba imposible publicarlos todos eran más de mil y el autor no tenía entonces copia de todos ellos. Entre aquellos escritos hallamos muchos de gran calidad literaria. Damos ahora a conocer a sus lectores estos relatos, muy vanguardistas, con un alto componente de absurdo y en los que hace despliegue de gran cantidad de innovaciones literarias. El propio autor es protagonista de algunos de ellos, lo que permitirá al lector asomarse a su personalidad, excéntrica y excepcional.
Enrique Jardiel Poncela (Madrid, 1901-1952) es uno de los grandes renovadores de la novela y el teatro de humor. Tras publicar 'Amor se escribe sin hache' (1929), viajó a Hollywood como guionista de la Fox. Miembro del grupo literario bautizado por José López Rubio como La otra generación del 27 , del que también forman parte Edgar Neville y Miguel Mihura, es autor de obras de narrativa como 'Novísimas aventuras de Sherlock Holmes' (1928), '¡Espérame en Siberia, vida mía!' (1930), 'Pero ¿hubo alguna vez once mil vírgenes?' (1931), 'La tournée de Dios' (1932) y 'Los 38 asesinatos y medio del Castillo de Hull' (1936), aunque su mayor popularidad la obtuvo en el teatro con comedias que suscitaron fuertes polémicas en el momento de su estreno y cosecharon enorme éxito: 'Usted tiene ojos de mujer fatal' (1933), 'Cuatro corazones con freno y marcha atrás' (1936), 'Eloísa está debajo de un almendro' (1940),'Los ladrones somos gente honrada' (1941) Hoy es considerado un maestro de la literatura de humor. Complejo, pesimista y desigual, en su nicho mandó grabar el epitafio: Si queréis los mayores elogios, moríos .
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