Editorial Imprimerie Nationale
Fecha de edición septiembre 2000
Idioma francés
EAN 9782743300869
595 páginas
Libro
Vingt siècles après la parution du De rerum natura, dont le manuscrit parvint, par hasard, entre les mains de Cicéron, Lucrèce apparaît dans l'histoire littéraire comme le premier poète visionnaire, capable de réaliser l'alliance toujours souhaitée de la science et de la poésie. On lui doit l'exposé le plus complet d'une des grandes philosophies de l'Antiquité, celle d'Epicure, qui, sans le poète latin, se réduirait pour nous aux linéaments de trois Lettres, à Hérodote, à Ménécée et à Pythoclès. A un exposé didactique sur la physique et la morale, Lucrèce, en fervent disciple d'Epicure désireux de convertir à cette philosophie son ami Memmius, a su donner la forme de la grande poésie. Au moment où Cicéron portait à son équilibre classique la langue latine, Lucrèce donnait aux lettres de Rome son plus grand poème avec l'Enéide de Virgile. Deux mille ans plus tard, ce poème philosophique sur la création (tel pourrait être, en effet, le titre du poème) demeure actuel, par la vision sombre et pénétrante d'un univers périssable et composé d'atomes, parmi l'infini des mondes, par la mise en garde contre les excès de la religion, par la sobre conception d'un bonheur personnel fondé sur une stricte hiérarchie des plaisirs et sur l'absence de trouble intérieur, l'ataraxie, source du souverain bien, condition du bonheur.
99 a. C. - 55 a. C. Poeta y filósofo romano.<br>Es autor de un largo poema didáctico, De rerum natura (Sobre la naturaleza de las cosas), en algo más de 7.400 hexámetros distribuidos en seis libros, acaso la mayor obra de la poesía de Roma. En este poema se divulgan la filosofía y la física atomistas que había tomado Epicuro de Demócrito. El único texto que poseemos del poema se ha transmitido gracias a Cicerón, quien preparó su edición a la muerte del poeta, y al humanista Poggio Bracciolini, que lo copió en 1418 del único códice conservado. En deliberado contraste, se inicia con un himno a la diosa Venus generatriz y termina con una descripción de la peste de Atenas.<br>Son pocos y dudosos los datos biográficos que se conservan de Lucrecio y fundamentalmente recogidos por San Jerónimo. Según ellos, enloqueció al beber un filtro de amor y se suicidó; pero esta información tiene todo el aspecto de haber sido compuesta ad hoc para explicar la sombría visión que ofrece del amor en su célebre poema. La tradición ha defendido que padecía algún tipo de enfermedad mental, que podría ser o no de origen físico (como la epilepsia), tratando de desprestigiar así una visión de las cosas tan alejada del dogma de fe.<br>Su tercer nombre, Caro, era propio de las clases bajas, pero Lucrecio tenía una extensa cultura, que no era fácil de adquirir si uno no pertenecía a una familia pudiente. Se ignora si era originario de la misma Roma o de alguna provincia, pero es indudable que Lucrecio vivió en Roma y resulta evidente, por la franja de fechas en que se desarrolló su vida, que debió asistir a las guerras civiles romanas, a las revueltas de Mario y Sila, a la conjuración de Catilina y a la ascensión de Julio César.<br>También afirma San Jerónimo que Cicerón ordenó el texto en seis libros y editó el poema. El primer libro comienza con una invocación a Venus como fuerza germinadora de la naturaleza y trata de cómo todo está compuesto de átomos y de vacío. El libro segundo trata del movimiento y agrupaciones de los átomos. El tercer libro habla sobre el alma, que es mortal. El cuarto sobre la teoría de la sensación, el quinto sobre el mundo y el sexto sobre diversos fenómenos atmosféricos y las enfermedades, terminando con un sombrío panorama sobre los estragos de la peste en Atenas, en deliberado contraste con el inicio.<br>Los análisis a la obra de poetas posteriores demuestran que le habían estudiado a fondo. A él alude Virgilio cuando escribe:<br>Felix qui potuit rerum cognoscere causas<br>atque metus omnes, et inexorablile fatum<br>subiecit pedibus, strepitumque Acherontis avari! Geórgicas, lib. II.<br>Utiliza comparaciones para aliviar la árida materia abstracta de la obra, mezclando, con una imagen que más tarde tomará Horacio, lo útil con lo dulce de la misma manera que un médico mezcla dulce miel en las agrias medicinas que administra. También es citado en numerosas ocasiones por Montaigne a lo largo de sus Ensayos (1595). La obra de Lucrecio, materialista e irreligiosa, fue traducida por el afrancesado y revolucionario jacobino español José Marchena a principios del siglo XIX en endecasílabo blanco con la intención de combatir el catolicismo de sus compatriotas.<br>La intención de Lucrecio, como ya señaló Virgilio, es liberar al hombre del miedo a los dioses y a la muerte, causas, según él, de la infelicidad humana. ("Está bien ver al navegante lejano luchar contra la borrasca y naufragar, no porque nos alegremos del mal ajeno, sino porque es bueno hallarse libre de tormentos"). El texto pertenece al género del perifíseos griego, poemas o textos de filósofos presocráticos que intentaban explicar el origen del mundo. Representa el cosmos como un conjunto fortuito de átomos que se mueven en el vacío ("Ninguna cosa nace de la nada", verso 211; "De la nada, nada puede hacerse", verso 219; "Nada puede a la nada reducirse / ni alguna cosa hacerse de la nada", versos 1071 y 1072). El alma es material y no sobrevive al cuerpo. Los fenómenos tienen todos causa natural. Si existen los dioses, estos no intervienen en los asuntos de los mortales. La triste visión del amor humano que ofrece ha intrigado a los especialistas.
|