Editorial Visor Libros
Colección Visor Poesía, Número 203
Lugar de edición
Madrid, España
Fecha de edición noviembre 2012 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788475222035
80 páginas
Libro
Dimensiones 125 mm x 195 mm
Javier Salvago (Paradas, Sevilla, 1950) es, según Ortiz, un poeta de estirpe simbolista que pertenece al linaje de los que .
En su poesía, como era norma en el movimiento simbolista, se dan la mano lo oculto y lo popular.
El tema de sus versos es la experiencia cotidiana y ésta es expresada peor medio del humor y la ironía.
Recursos poco hispánicos, aunque los hayan usado algunos de los mejores poetas de nuestra lengua: Bécquer, M.
Machado, Lugones, Gil de Biedma, como herederos de una tradición que se inagura con Baudelaire y se continúa con Larbaud, Corbiére y el joven Eliot.
Es decir, aquellos poetas que hicieron de la ciudad moderna su lema y adoptaron su lenguaje deliberadamente prosaico, conversacional e irónico
Javier Salvago. Dos años después de publicar su primera novela, La matanza de Collejas, Javier Salvago (Paradas, Sevilla, 1950) nos ofrece una nueva entrega: La primera que lo llamó Alain Delon. Se consolida así la dimensión de narrador de un autor conocido y reconocido, sobre todo, como poeta. Una decena de libros de poemas, entre los que destacan títulos como La destrucción o el humor, Volverlo a intentar, Los mejores años, Ulises o Una mala vida la tiene cualquiera, reunidos en el volumen de poesías completas Variaciones y reincidencias (Poesía 1978-2018) lo avalan como uno de los poetas más destacados de su generación. Como prosista ha publicado dos libros autobiográficos x{0026} x02013;Memorias de un antihéroe y El purgatoriox{0026} x02013;, tres de cuentos x{0026} x02013;El miedo, la suerte y la muerte, No sueñes conmigo y El corazón de oro y otros relatosx{0026} x02013;, un libro de aforismos x{0026} x02013;Hablando solo por la callex{0026} x02013; y las dos novelas ya citadas. Fiel a su estilo, claro y directo, Salvago vuelve a la carga con una escabrosa historia que, de seguro y como poco, va a sorprender.
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