Santiago Balboa pudo escuchar cómo su compañero de utopías gritaba ¡Viva la República! mientras moría sin soltar el gatillo de su ametralladora. Pero la desgracia termina transformándose en rutina. Y cuando uno lo ha perdido todo en una guerra fratricida incluso a su mujer y a su hija , y está al límite de sus fuerzas, ya sólo puede intentar sobrevivir intercambiando unas pocas palabras con una niña, un trozo de pan por una historia
Nació en Cartavio-Coaña, un pueblecito de Asturias. Estudió Filología Española, Derecho y Trabajo Social. Entró, por casualidad, en el periodismo, donde lo probó casi todo, incluidos dos años en la última página del diario x{0026}lt;i ASx{0026}lt;/i . Colaboró en x{0026}lt;i El Correo Vasco,x{0026}lt;/i impartió cursos a profesores de Lengua y Literatura y a alumnos de bachiller, y escribió numerosas novelas para jóvenes.<br> Falleció en febrero de 2021.
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