Editorial Alianza
Colección 13/20, Número 0
Lugar de edición
Madrid
Fecha de edición febrero 2023 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788411481892
160 páginas
Libro
encuadernado en tapa dura
Dimensiones 135 mm x 205 mm
¿Qué habría pasado si Shakespeare hubiera tenido una hermana con su mismo talento para la escritura? Probablemente, que él seguiría siendo un faro de las letras universales y ella, condenada al anonimato, se habría suicidado.
Esto decía Virginia Woolf a las estudiantes universitarias que en 1928 atendieron a sus conferencias sobre las mujeres y la literatura. Y lo decía, precisamente, invocando también a Jane Austen o a las Brontë, para animarlas a no dejarse aplastar por el peso de una historia eminentemente masculina. Una habitación propia sigue siendo hoy libro de cabecera porque es una invitación a la creación libre de prejuicios y de obstáculos, y una llamada al encuentro de las mujeres con la escritura (y con la realidad) para que ocupen por fin el lugar que siempre han merecido. Y porque es, además, un texto brillante, divertido y mordaz que no se agota jamás en la relectura y que refleja la grandeza de su autora: una de las escritoras más geniales de la historia.
Traducción de Catalina Martínez Muñoz
x{0026}lt;p Virginia Woolf (1882-1941), nacida Adeline Virginia Stephen, fue una novelista, ensayista y feminista inglesa. De salud frágil desde joven, comenzó a escribir un diario a los quince años, combinando esta actividad con numerosas lecturas y con estudios de historia y griego en el Kingx{0026} x02019;s College.x{0026}lt;/p x{0026}lt;p A partir de 1904, inició su carrera como escritora publicando artículos y reseñas en The Guardian. Por aquellos años, la casa familiar se convirtió en un punto de encuentro para intelectuales, entre los que conoció a su futuro marido, Leonard Woolf. Juntos fundaron en 1917 la prestigiosa editorial The Hogarth Press, sello fundamental en la difusión de la literatura modernista. Entre 1925 y 1931 publicó La señora Dalloway, Al faro, Orlando y Las olas, obras que la consolidaron como una de las voces más innovadoras de su tiempo.x{0026}lt;/p x{0026}lt;p Las crisis depresivas que la acompañaron a lo largo de su vida se agravaron con el tiempo y el 28 de marzo de 1941, tras haber entregado a su editor su último manuscrito, Virginia Woolf puso fin a su vida arrojándose al río Ouse, en Sussex, con los bolsillos llenos de piedras.x{0026}lt;/p
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