Editorial Siruela
Colección Libros del tiempo, Número 0
Lugar de edición
Madrid, España
Fecha de edición marzo 2024 · Edición nº 1
Idioma español
EAN 9788419942333
82 páginas
Libro
encuadernado en tapa dura
Dimensiones 145 mm x 215 mm
Una pieza de literatura criminal, en el más amplio sentido, a cargo de uno de los grandes novelistas de nuestra lengua, poco posterior a la obra inaugural de Edgar Allan Poe, coetánea a la de Conan Doyle y anterior a la de Dashiell Hammett . Lorenzo Silva El 2 de julio de 1888 por la mañana, en el 2º Izquierda del número 109 de la madrileña calle de Fuencarral, la policía, alarmada por los vecinos, encontró el cuerpo sin vida de Luciana Borcino ardiendo en una habitación cerrada. Justo en el cuarto de al lado, la sirvienta, Higinia Balaguer Ostalé, dormía bajo el efecto de un narcótico acompañada por el bulldog de la propietaria. Lo estereotipado de los sospechosos la criada explotada y maltratada, y el hijo de la víctima, señorito casquivano y derrochador provocó que el asesinato fuera el centro de todas las conversaciones y llenara páginas y más páginas en todos los diarios de la época. Cuando sucedió el crimen, Benito Pérez Galdós colaboraba como corresponsal para La Prensa de Buenos Aires, y en forma de cartas dirigidas a su director, publicaría el seguimiento del caso desde su inicio hasta mayo de 1889, en que se dictó sentencia. Son esos artículos, de radical vigencia y modernidad, lo que aquí se ofrece a los lectores: el primer true crime de la narrativa de género policiaco española.
Benito Pérez Galdós nació en Gran Canaria en 1843. Con veinte años viajó por Europa como corresponsal y a la vuelta tradujo a Dickens a partir de las ediciones francesas. En 1873 empezó a publicar los Episodios Nacionales, obra que le granjeó una inmensa popularidad y que continuaría escribiendo a lo largo de cinco series y a la par que novelas como Fortunata y Jacinta (1887), Miau (1888), Tristana (1892), Misericordia (1897), El abuelo (1897), Casandra (1905), El caballero encantado (1909; Nocturna, 2024) y La razón de la sinrazón (1915). En 1897 fue nombrado miembro de la Real Academia de la Lengua Española. Colaboró con diversos medios de comunicación y perteneció al Partido Progresista de Sagasta, al Partido Republicano y a la Conjunción Republicano-Socialista (con este último, fue diputado en las Cortes en las legislaturas de 1907 y 1910). En 1912 fue propuesto para el Premio Nobel de Literatura y un año después se quedó ciego. Murió en Madrid en 1920.
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